Entender el mar, es imprescindible en nuetro deporte, tanto fuera como dentro del agua. Cada ola es única, es por esa razón que nuestro deporte es diferente a otros. El medio donde se practica es inestable y a la vez cambiante, eso hace que estemos tan arraigados a él y nos cree en nuestro interior esa sensación de malestar al saber que hay olas y no podemos ver el mar, como estará, romperá bien, estará ordenado???. Por otra parte ya en el agua, llegamos con las ansias y nos queremos sacar ese maniobrón que la noche antes hemos estado mirando en uno de esos videos donde todo lo que reluce es oro. El mar y el surf se han unido por parte del hombre, eso requiere un esfuerzo por parte de las personas, porque es evidente que la naturaleza sigue su curso y en pocas palabras si el mar quiere tirarse un pedo se lo tira y si quiere tirarse un erupto se lo tira, no podemos cambiar nada, somos nosotros que nos tenemos que adaptar a él. Después de todo ese tiempo que llevo cogiendo olas, y dejarme aconsejar por gente mas veterana que yo, he comprobado que hay que seguir el curso de las olas y no querer hacer una maniobra donde no la hay. He llegado a entender que, mas que querer aprender maniobras nuevas, cabe entender el deslizamiento y la velocidad. La anticipación es clave y básica, saber leer y entender lo que nos viene a unos pocos metros delante de la punta de la tabla, requiere horas de práctica. Los profesionales tienen en mente hasta la tercera maniobra que van a realizar en la misma ola, debido a su capaciad de anticipación desarrollada, mediante horas y horas de entrenamiento. Entender el mar lo es todo en el surf.
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